Todo es cuestión de el azar, las caidas y los triunfos experimentados en aquellas personas son inevitables que nos duelan a nuestros ojos, pero ¿Sabeis?, alguien me dijo "Que nunca me arrepintiese de algo que me hizo sonreir" y es cierto, porque si alguien te enseñó a sonreir tiene un perfecto don para hacer feliz a la gente, y al fin y al cabo, de eso se trata la vida, de ser feliz, o al menos intentarlo.
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